Aunque en ocasiones la naturaleza pueda ofrecernos “mutaciones” en alimentos que se han desarrollado sin efecto del hombre, tenemos que decir que esto nada tiene que ver con los conocidos como alimentos transgénicos y que de hecho se han “creado” a partir de la combinación de genes o de la manipulación del ADN de un alimento para convertirlo en otro que sea mucho más resistente.
Como se crean o consiguen los alimentos transgénicos:- Los alimentos transgénicos se crean a partir de la manipulación genética. Cada alimento tiene su genética que de hecho marcará sus características.
- Además dentro de cada ser vivo, en este caso hablamos de alimentos, existe un núcleo en el que se diferencia los cromosomas y que están formadas a partir de cadenas de ADN que incluyen los cuáles identificamos como genes.
- De este modo,los alimentos que acaban siendo transgénicos, son aquellos que a partir de su ADN contienen genes que en realidad no les pertenecen por naturaleza y que han sido introducidos para que acaben formando parte de su genoma.
- Por ejemplo, los tomates pueden ser modificados para hacer de ellos un alimentos transgénico. Para ello se debe extraer de uno de los doce cromosomas que contiene.
- Por otro lado tendremos otro organismo al que le extaeremos el gen que nos interese implantar en el tomate.
- La ingeniería genética es la que va a permitir que se clone, se modifique y se fragmente el gen que se haya de implantar al ADN del tomate sin causarle daño alguno a su núcleo.
- Podemos conseguir que se implante un gen que haga que la piel del tomate no se arruge o que se mantenga durante más tiempo que de costumbre.
- Aunque son muchos los que critican el que se creen este tipo de alimentos, tenemos que destacar que los tratados transgenicamente resisten mejor las plagas por lo que se acaba reduciendo el uso de insecticidas en los campos de cultivo.
- Además este tipo de alimentos resisten mejor el frío y la sequedad cuando se trate de plantas de cultivo o alimentos que son agrícolas como por ejemplo el maíz.
- La modificación genética en alimentos puede dar plantas que sean más cortas y fuertes y que se concentren su energía en su parte comestible.
- En cuanto a nuestra alimentación se dice que este tipo de alimentos modificados pueden conseguir aumentar sus proteínas y vitaminas y disminuir su contenido en grasas.
- Los alimentos pueden durar en buen estado mucho más tiempo y además mejorar su sabor, olor y aspecto.
- En cuanto a los inconvenientes de estas manipulaciones genéticas, es evidente que no puede resultar beneficioso el modificar el ADN natural de los alimentos.
- Por otro lado puede ser que los genes implantados no desarrollen el carácter de la forma esperada o se produzca un rechazo.
- Ecologistas y organizaciones de consumidores aseguran que estas mutaciones o implantaciones genéticas, a la larga pueden desarrollar enfermedades en animales y en organismos, así como enfermedades más virulentas, una biodiversidad mas reducida, mayor contaminación del agua, el alimento y la tierra, y la alteracióndel equilibrio de la naturaleza.
¿A quién creer?
Se dicen cosas muy fes de los transgénicos, cancer, esterilidad y cosas mu malas, yo no me fio ni un pelo...
ResponderEliminarBesos y salud
Siempre he evitado los transgénicos, al menos hasta donde he podido controlar el tema. Los beneficios son casi todos mercantiles, y los inconvenientes pueden ser muy severos. Luego te dicen que no, que las plantas sean más resistentes va a beneficiar al hambre en el mundo, pero uno tiene la sensación de que no investigan tanto para paliar el hambre en el mundo sino para llenarse los bolsillos, hipócritas que son.
ResponderEliminarSiempre los he intentado evitar, te decía, pero la cosa es tan complicada, porque comemos en restaurantes, tomamos atún en conserva (que lleva aceite), tomamos soja que aunque advierte que no es modificada en realidad uno nunca sabe...
Lo único que cabe esperar es que con la biología genética, lo que una cosa te enferme otra te cure...
Lo peor de todo ésto es que estamos tomando transgénicos sin saberlo, porque no vienen etiquetados. Además de que nos los han metido sin haber comprobado sus efectos sobre la naturaleza humana y animal.
ResponderEliminarY hay otras cosas como por ejemplo que contagian los espacios colindantes...y eso da que pensar, porque la belleza no se contagia, la maldad, sí...
Pues yo prefiero creer a los detractores de los transgénicos porque las multinacionales ya sabemos de qué pie cojean y qué intereses tienen, así que qué van a decir. Lo que no es de recibo es que los hayan introducido en el consumo humano utilizándonos de conejillos de indias.
ResponderEliminarPor si quieres leer más sobre el tema te dejo un par de entradas de un amigo bloguero de Pamplona, Silvano. Él es medico, y después de trabajar en el Servicio Navarro de Salud, lo dejó para dedicarse a la medicina alternativa. Aquí va una entrada, y aquí la otra.
Besos